Queridos lectores:
La próxima semana el Miercoles 30 de Abril a las 20:30 Horas tendrá lugar en el Ateneo Varillas C/Varillas 3 Piso 1ºD en León,
la presentación de la Iniciativa Legislativa Popular por una Renta Básica.
Os esperamos
Un saludo
Texto de la ILP
Iniciativa Legislativa
Popular por una Renta Básica
Presentada en el Congreso de los Diputados
el 15 de enero de 2014
Aprobada el día 14 de Marzo de 2014
Exposición
de motivos
“No
somos mercancías en manos de políticos y banqueros”. En las plazas de todo el
Estado, han resonado durante el año 2011 estas palabras indignadas, expresando
el hartazgo
de la ciudadanía.
La
crisis multiplica el número de damnificados por las políticas capitalistas y
neoliberales. Ello ha supuesto que 5.977.500 de personas se encuentren en
situación de desempleo según datos de la EPA del segundo trimestre de 2013;
recortes sociales en sanidad, educación o de ayudas a la dependencia mediante
menor asignación presupuestaria y privatizaciones, entre otras; y un
preocupante aumento de la precarización de las condiciones laborales y los
abusos ejercidos sobre los trabajadores. La carencia de empleo y de ingresos
constituye uno de los principales motivos de desahucios. Según el Consejo
General del Poder Judicial, el número de desahucios (lanzamientos) en 2012 era
de 101.034 y para 2013 estima que el 37,5% será motivado por ejecuciones
hipotecarias y el 57,7%, ejecuciones de arrendamiento. Resulta inadmisible que
en un estado democrático, social y de derecho a la vez que el uso y disfrute de
una vivienda digna, el empleo en un trabajo digno y la garantía de suficiencia
económica de las personas son constitucionalmente declarados, se consienta que
simultáneamente existan situaciones en las que a las personas se les prive de
ellos.
Mientas
tanto, el Estado reflota a la banca inyectándole cantidades astronómicas de
dinero público, los barrios se deterioran a marchas aceleradas, el número de
personas que no disponen de ningún tipo de prestaciones sociales acrecienta a
medida que se desarrolla el periodo de crisis, el fantasma de la pobreza
infantil vuelve a asomarse en nuestra realidad cotidiana, aumentan las
enfermedades mentales y suicidios, los comedores sociales y programas de
alimentos se ven desbordados. Pobreza, paro, precariedad y marginación se
anudan, limitando la libertad real de millones de personas y expulsándolas a la
cuneta, a la exclusión social.
Junto a
la pobreza conocida emergen nuevas formas de marginación y precariedad. En el
Estado Español, la tasa de personas en riesgo de pobreza y/o exclusión social
es del 27% para el año 2011 según EUROSTAT. Casi la mitad de los jóvenes se
encuentran en paro, condenados a vivir en casa de sus padres; la emigración
acaba constituyendo la única perspectiva incluso para muchos jóvenes con
titulación universitaria, emigración obligatoria que desde las tribunas del
poder se atreven a afirmar, sin pudor alguno, que constituye una fortaleza para
los jóvenes y para el conjunto del Estado.
En esta
situación, las ayudas no contributivas y las correspondientes a rentas mínimas
establecidas por las instituciones públicas, muy dispares entre los distintos
territorios que conforman el Estado español, muestran descarnadamente su radical
inadecuación a la realidad, se revelan insuficientes para la condición de
habitabilidad digna de las personas y se terminan convirtiendo en una miserable
carrera de obstáculos debido a su excesiva burocratización y a su
condicionamiento a situaciones de emergencia límite que no cubren la situación
de emergencia social generalizada.
A los
que mandan se les llena la boca de palabras como pleno empleo, Estado del
Bienestar o protección social. Y las leyes fundamentales, tales como la
Constitución Española o los Estatutos de Autonomía establecen con solemnidad
esos derechos sociales elementales, que en una gran proporción de los casos no
son ejecutados por su supeditación a la supremacía económica. Ha llegado la
hora de exigirles que cumplan las leyes y que sus hechos se compadezcan de sus
bonitos discursos.
Toda la
situación expuesta en este preámbulo supone una flagrante violación del Derecho
a la vida expuesto en el artículo 15º de la Constitución Española y en el 3º de
la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Por ello, de la unión de un
gran número de personas ha surgido el “Movimiento Contra el Paro y la
Precariedad. Por una Renta Básica Ya”, apoyado por distintos colectivos y
movimientos sociales, para decir basta y exigir una respuesta urgente a esta
situación. Consideramos que una de las primeras medidas a tomar es la
implantación de la Renta Básica a nivel estatal. En esta propuesta se dan la
mano la lucha contra la marginación social y la pertinencia de dar cauce a un
nuevo derecho de personas, cuya reivindicación se ha ido asentando en los
últimos años.
El
nivel de pobreza que ha alcanzado el Estado español se sitúa en el 13,7%, según
datos de la OCDE, y no es previsible una mejora en el medio plazo. De su
solución no deben encargarse las llamadas agencias de caridad, el sector
privado, ni el tercer sector. De lo contrario, esta realidad debe ser entendida
como una situación social y colectiva, de emergencia y estructural, de
degradación de las condiciones de vida. En base a ello, es el Estado el
responsable en su eliminación.
Así
Renta Básica es un instrumento factible de erradicación de la pobreza, un
mecanismo de reparto de la riqueza y distribución de la renta, que puede dar
seguridad económica a la población frente a la incertidumbre y la
arbitrariedad, permite iniciar otros modos de vida, fomenta la igualdad de
género y contribuye a eliminar los estigmas sociales. Estimamos que la Renta
Básica puede ser un pilar del nuevo sistema de bienestar y un instrumento útil
para defenderse del deterioro de las condiciones de vida que impone el
capitalismo global. Pero, para que constituya una herramienta de transformación
social, es preciso superar la manipulación que ha sufrido el concepto por parte
de los poderes. La Renta Básica que defendemos no es una limosna, una
prestación asistencial, ni un salario de pobres.
No
queremos una ayuda graciable, mangoneada por la administración de turno, sino
un derecho inherente a la condición de personas. Consideramos la Renta Básica
una propuesta para hacer justicia, no una medida para practicar la caridad
pública, perpetuar los guetos y la segregación social. Defendemos el modelo de
Renta Básica de las Iguales, modelo que vienen defendiendo diversos movimientos
sociales tales como Baladre, así como otros modelos en los que trabajan un gran
número de colectivos y movimientos del Estado español que vienen luchando por
una Renta Básica como un derecho con las características de individualidad
universalidad, e incondicionalidad (o no sujeto al mercado de trabajo) y que ha
sido culminado por una Iniciativa Legislativa Popular autonómica llevada a cabo
por la Plataforma Extremeña contra la Exclusión Social y los Campamentos
Dignidad, contando con un gran consenso de la población. Concebimos la
Iniciativa Legislativa Popular por la Renta Básica como una herramienta para
sacar de la intemperie a miles de personas, pero también para combatir el miedo
y la desmovilización social. “No hay pan para tanto chorizo”, se ha gritado con
rabia en las plazas. No hay dinero para saciar la codicia de los delincuentes
de cuello blanco. Sí hay y debe haber recursos para garantizar una vida austera
pero digna a todas las personas. Por todo lo expuesto, presentamos la
siguiente Iniciativa Legislativa Popular:
Articulado
Artículo
1. Derecho a la Renta Básica. Se establece el derecho de todo persona, por el
hecho de haber nacido, a recibir una cantidad periódica que cubra sus
necesidades básicas. La Renta Básica se constituye como derecho individual,
universal e incondicional. Disposición transitoria. La cuantía de la Renta
Básica será la equivalente al Umbral de la pobreza fijado en “el 60% de la
mediana de la distribución de los ingresos por unidad de consumo adjudicados a
las personas”, será de 645,33 euros mensuales correspondiendo al último dato
expuesto por EUROSTAT (año 2011), tendiendo a equipararse en los años sucesivos
al equivalente del mismo concepto.
Disposición
Adicional Primera.
Aplicación
gradual. Se establecen dos fases de implementación de la Renta Básica. Una
primera fase que entrará en vigor de forma inmediata tras la aprobación de la
presente Ley. Afectará a todas las personas domiciliadas en el Estado Español e
inscritas en el Servicio Público de Empleo correspondiente a cada territorio,
que no tengan cobertura por desempleo ni dispongan de otros ingresos. De la
misma manera afectará a aquellas personas cuyas rentas, ya provengan de
salarios, subsidios o pensiones públicas, sean inferiores a la cuantía de Renta
Básica prevista en este texto, complementando los mismos hasta alcanzar la
cuantía establecida para la Renta Básica. En la segunda fase, se regulará la
extensión de la Renta Básica como derecho universal, integrando pues al resto
de personas.
Disposición
Adicional Segunda.
Los
poderes públicos promoverán la implantación de la Renta Básica en el ámbito del
Estado Español y de la Unión Europea.
2 comentarios:
¡ES TIEMPO DE
ALTERNATIVAS,
ES TIEMPO DE LUCHA!
EL MOVIMIENTO CONTRA EL PARO
Y LA PRECARIEDAD EXIGE:
• RENTA BÁSICA y EMPLEO NECESARIO.
• Derecho a VIVIENDA para todos.
• SERVICIOS PÚBLICOS para todos
• NO al pago de la DEUDA: ilegal, ilegítima y odiosa. Y que ese dinero se destine a una Renta Básica Universal.
Colabora para hacerlo posible:
Financiando la Iniciativa Legislativa Popular por una Renta Básica http://goteo.org/project/ilp-renta-basica, uniéndote a la lista de fedatarios http://ilprentabasica.org/fedatarios/ , con tu donativo en La Caixa (IBAN: ES82 2100 2120 8502 0044 9240)
Más información: http://ilprentabasica.org/ .
Hola. Enlazo a un resumen acerca de la Renta Básica Universal: http://rentabasicauniversal.wordpress.com/
Saludos
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